Hay decisiones que puedes alargar un tiempo, pero no eternamente, una de ellas es la elección de carrera universitaria.
Esa obligación que llega en el momento de acabar la enseñanza obligatoria, cuando decides que quieres continuar con los estudios, pero no estás seguro de por cuáles de ellos apostar.
Las dudas que tienes son demasiadas, tanto las que nacen en tu cabeza como las que te llegan del exterior y que te influyen en mayor o menor medida.
Es importante que tomes la decisión con la cabeza fría y pensando en ti, en tus capacidades y en tu futuro, es la manera de conseguir que estés listo afrontar una carrera universitaria
La elección no es sencilla, para nada, en la Residencia Universitaria Montepríncipe lo sabemos y queremos ayudarte en todo lo que podamos.
Elegir bien una carrera universitaria
Aquí podrás encontrar...
Un factor determinante es tu juventud, la responsabilidad que tienes que tomar es demasiado grande y, muchas veces, no tienes toda la información para hacerlo.
Marca un antes y un después y diferencia entre malgastar años de tu vida en estudios que no te llevan a nada, o encarar y hacer frente al mundo laboral convencido de la decisión que has tomado.
Es una decisión que, a tu edad, te puede abrumar y paralizar hasta el punto de fijarte demasiado en el exterior, en lo que hace el resto, o en los que escuchas qué deberías hacer y olvidarte de quien de verdad debe decidir: tú
Saber que eliges algo que, cuando te ves inmerso, no es lo tuyo y pensar que vas a fracasar es muy difícil.
Para tomar una mejor decisión hay diferentes factores que, si los conoces, te la facilitan.
Factores que influyen en la elección de carrera
Los hay tanto interiores como exteriores, no eres capaz de tomar la decisión y te ves agobiado por lo que te dice tu cabeza y por lo que escuchas desde fuera de ella.
Demasiadas opciones delante de ti
La universidad pone a tu alcance una amplia gama de estudios que abarcan cualquier profesión que quieras realizar, tantas que te vas a sentir abrumado,
La dificultad de la toma de tu decisión se dilata demasiado, y cuanto más buscas, más aparecen y se convierte en un infierno.
Ya no solo es la carrera en sí, sino las oportunidades que implica cada una, y los diferentes caminos profesionales que puedes seguir si te decantas por ellas.
La presión de tu entorno
No son pocos los casos en los que la familia tiene una decisión casi más importante que la del propio estudiante.
Generaciones que han seguido el mismo camino, por ejemplo, que hacen que te veas obligado a estudiar lo que se ha estudiado en tu familia desde hace mucho tiempo.
Con la excusa de que es lo mejor para ti, y de que tienes trabajo asegurado, siempre con el argumento de que es la decisión correcta que debes tomar.
Es una buena decisión, y la más segura, siempre que a ti te guste ese futuro, ten en cuenta que no por venir de una familia de médicos te debe gustar la medicina, es posible, pero no debe ser tu única opción.
No cumplir con las expectativas que ponen en ti también es una presión que añades a este momento, se genera un miedo a defraudar y a tomar la decisión equivocada
Miedo a una decisión equivocada
Esas dudas y ese miedo a equivocarse lo tienes tú y la gran mayoría de estudiantes cuando llega ese momento.
Pensar en que en una decisión que va a marcar tu futuro, que de ella depende elegir una profesión en la que vas a ser feliz, y de la que puedes vivir toda tu vida o tener que empezar de nuevo.
Pensar todo eso te llega a paralizar.
Incertidumbre de la situación del mundo laboral
El mercado laboral avanza a un ritmo vertiginoso, lo que ahora se presenta como un futuro prometedor, cuando termines los estudios puede que ya no lo sea tanto
La demanda de profesionales de los diferentes sectores es algo que no está estancado, pensar que la decisión que tomes puede quedar obsoleta en poco tiempo, y que puedes tirar por la borda años de tu vida, da mucho miedo.
Intereses vs pasiones
Una cosa es lo que te interesa y otra lo que te apasiona, y a veces no están ni siquiera cerca.
Es fácil que tengas que renunciar a lo que de verdad te gusta hacer, por lo que más te conviene, y esa idea genera demasiada ansiedad.
Temor a defraudarte a ti mismo
A quien más se teme defraudar es a uno mismo, ¿y si me equivoco?, ¿y si no me gusta?, ¿y si luego no soy capaz?, son unas cuantas de las preguntas que llenan tu cabeza.
Pones muchas expectativas en una decisión y empiezas algo que, según avanza, no es como pensabas, y te sientes atrapado en un camino que tomaste cuando no estabas del todo preparado.
Cómo prepararte para no equivocarte
Es una decisión tuya, es tu futuro y debes plantearlo como algo a valorar según tus intereses y capacidades, todo tiene un equilibrio hasta tomar la decisión evaluando cada factor y siendo lo más sincero posible contigo.
Para eso, hay pasos que puedes dar en la fase de decidir que carrera universitaria seguir.
01.-Ser consciente de tus capacidades
Lo primero que debes tener en cuenta son tus intereses, habilidades y metas.
Destaca tus fortalezas y debilidades.
Plantearte dedicar tu vida a una profesión que parece muy interesante y atractiva, pero que sabes que no estás capacitado, es algo que debes recapacitar antes de seguir adelante.
Recuerda, aprovecha sus fortalezas sin dejar de lado tus debilidades, tener en cuenta ambas es lo que inclina la balanza en el lado adecuado.
02.-Investiga el mercado al que quieres acceder
Realiza una investigación profunda de las carreras que tienes como opción, además de conocer el mundo laboral al que aspiras con tu decisión.
Sus programas de estudio, sus requisitos para empezar en el sector, las perspectivas de empleo actuales, condiciones económicas,…
Seguro que no van a ser las mismas que te encuentres, pero te van a ser de mucha ayuda, te dan una visión muy amplia de cada campo, una perspectiva diferente que te facilita superar esos momentos de bloqueo.
03.-Realiza prácticas y pasantías
Es la mejor manera de ser la realidad.
Vives, y convives, con los problemas y la alegría de estar dentro de una vida sin tener todavía más responsabilidad que la de aprender de la experiencia.
La mejor forma de darte cuenta si sirves o no pagar una profesión es participar en ella.
04.-Busca consejo y orientación
Acude a profesionales del sector y a consejeros de orientación laboral, que te pueden dar una visión más clara que la que tú tienes.
05.-Networking la mejor manera de empezar a crecer
Conseguir una red de contactos en el sector al que pretendes acceder es lo que te puede diferenciar del resto.
Acude a eventos y consigue información de primera mano de la carrera que estás a punto de decidir, acércate a otros estudiantes y comenta tus dudas con ellos, son quienes te van a dar una visión más realista de tu futuro.
Una cosa es muy importante, no es una decisión que no pueda dar un paso atrás, no lo olvides.
Darte cuenta de que te has equivocado a tiempo para empezar de nuevo no es un fracaso, sino una muy buena decisión que te aleja de un futuro que no te va a gustar.
En la Residencia Universitaria Montepríncipe tienes un apoyo que está a tu lado si decides iniciar esa nueva andadura con nosotros, pide una cita para conocernos, no lo dejes más, ¡te esperamos!