En la universidad tomar notas es una tarea cotidiana. Clases, conferencias, seminarios, proporcionan abundante información de utilidad que probablemente no alcances a obtener, por razones de tiempo o accesibilidad, en un libro. Escuchar la clase sin tomar notas te ayuda a concentrarte únicamente en lo que están diciendo. Pero si no procesas de inmediato la información, haciendo un resumen, analizándola o discutiéndola, corres el riesgo de olvidarla al poco tiempo.
De ahí la importancia de apuntar para que más tarde, cuando ya estés en las residencias universitarias, puedes repasar las notas. Junto con el recuerdo reciente de lo que oíste, puedes organizarlas, agregarles comentarios, y tenerlas a mano para estudiarlas cuando sea necesario.
Tomar notas con criterio
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Cuando tomes notas, no intentes copiar todo lo que dice el profesor o el conferencista. No lo lograrás, será como tomar un dictado, no estarás procesando la información, y además tu atención se perderá mientras tratas de reproducir exactamente lo que estás oyendo. Este consejo vale tanto para si estás tomando notas de la manera tradicional, con papel y bolígrafo o lápiz, como si estás usando un ordenador o tu teléfono de manera manual o con una aplicación para hacerlo.
- Escribe la interpretación de la información, no las palabras exactas.
- Concéntrate en lo fundamental y en lo que realmente te servirá para estudiar y repasar justo antes del examen.
- Subraya frases o palabras claves que te sirvan de recordatorio cuando ordenes o estudies tus notas.
- Toma nota de lo que el profesor ha escrito en la pizarra, o datos destacados en las presentaciones.
- Presta atención a los conceptos e ideas que se repiten, allí está el contenido esencial.
- Realiza asociaciones con comentarios en las notas que estás tomando. Por ejemplo, la referencia de un libro o autor que ha tratado un tema.
- Escribe recordatorios de conceptos o temas que debes investigar más para entenderlos a profundidad, o anota las preguntas que debes formular.
- Ayúdate haciendo esquemas, dibujos o mapas mentales.
- Utiliza símbolos o abreviaturas existentes o que hayas creado especialmente para tus apuntes. No olvides definir antes su significado para que no te pierdas cuando organices tus notas.
- Si necesitas pasar en limpio tus notas, no las dejes acumular, preferiblemente hazlo el mismo día. Agradecerás el orden cuando te estés preparando para los exámenes.
Aplicaciones para tomar notas
Existen herramientas tecnológicas gratuitas para tomar apuntes. Su principal ventaja es que organizan la información, la hacen más accesible para ti cuando vayas a estudiar o a repasar. Otra de las ventajas de las aplicaciones es que puedes abrirlas en cualquier lugar y momento desde un dispositivo móvil y también en un ordenador donde tendrás las notas sincronizadas.
- Simplenote: aplicación que reproduce un cuaderno, permite incluir listas, ideas, categorías, colores y etiquetas.
- Evernote: sincroniza y guarda tus documentos en la nube y permite la colaboración con otros usuarios. Te da la posibilidad de incluir notas en múltiples formatos: texto, audio, video, imágenes.
- Squid: puedes usarla para tomar apuntes a mano, incluso permite dibujos. Tiene espacio para hacer comentarios y también para organizar tus notas.
- OneNote: contiene libretas virtuales para organizar contenido. Puedes incluir notas escritas a mano con lápiz táctil, textos escaneados y recortes de páginas web.
- Moleskine Journal: se asemeja a un diario, puedes apuntar ideas, hacer anotaciones y comentarios sobre documentos.
Si decides grabar la clase o conferencia, existen aplicaciones que convierten la voz en texto, facilitan la tarea de transcribir y te ahorran tiempo. Algunas de estas herramientas te dan la posibilidad de tomar las notas durante la clase. Algunas de estas aplicaciones son Transcripción instantánea de Google, ListenAll y Speechnotes. Si eres del papel y boli, no te cierres a probar las alternativas que ofrece la tecnología o, cuando menos, a integrarlas a tus rutinas de tomar apuntes.
Métodos tradicionales para tomar notas
Una de las técnicas tradicionales para tomar apuntes es el Método Cornell.
- Divide la hoja en tres partes: notas, observaciones y resumen de los apuntes.
- En la parte de notas apunta frases e ideas.
- En la parte de observaciones escribe comentarios, palabras claves o referencias que puedan ayudarte a asociar y a recordar al momento de estudiar.
- En el espacio del resumen, condensa la información apuntada. Es un ejercicio útil para procesar los datos recibidos y comprenderlos.
Una técnica empleada por especialistas en memorizar es hacer mapas mentales.
- Dibuja el tema central en el medio de la hoja.
- Desde esa imagen central, salen ramas que equivalen a los temas principales, y de estos pueden surgir temas secundarios.
- Identifica cada tema con una palabra clave o con un dibujo.
- Usa colores para diferenciar los temas.
- Conecta las ramas para hacer asociaciones.
Otra de las técnicas tradicionales es grabar. Usa la grabadora de tu teléfono móvil y óyela después para tomar notas con más tiempo y tranquilidad.
Una de las ventajas de este método es que tienes la opción de retroceder y detener para entender mejor las ideas. Una desventaja es el tiempo que emplearás en oír nuevamente la clase.
Para darle mayor eficiencia a esta técnica:
- Toma apuntes normalmente. Al repasarlos, si hay alguna parte que no entiendas, escúchala.
- Al oír la grabación, no la transcribas textualmente, aunque sea más sencillo por la posibilidad de parar. Solo apunta lo relevante y que te sirva para preparar tus exámenes o tareas.
La mejor manera depende de ti
Tú decides cuál es el método que te va mejor para realizar tus notas en la universidad. Puede ser que prefieras el lápiz y el papel como una alternativa que siempre te ha dado buenos resultados. O que realices y organices tus apuntes usando únicamente la tecnología, o que emplees una mezcla de lo tradicional y lo innovador.
No hay buenas ni malas elecciones, solo posibilidades potencialmente eficientes porque dependerá del uso que les des. El rendimiento y los resultados de las técnicas, métodos y herramientas tecnológicas son proporcionales a tu esfuerzo y capacidad para organizarte.
Si estás claro que depende solo de ti y estás en disposición de trabajar para lograr tus objetivos académicos, entonces cualquier método funcionará para ti.