1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (Ninguna valoración todavía)
Cargando...
La salud mental en los universitarios

La salud mental es un tema de debate en las esferas políticas y su discusión obliga a muchas instituciones a moverse para conseguir un mayor bienestar en la sociedad. En el caso del ámbito universitario, la evidencia científica ya indica que los trastornos psicológicos y su relación con los hábitos de vida poco saludables han aumentado entre la comunidad académica y estudiantil.

La universidad es un entorno social complejo que reúne a millones de jóvenes que, en ocasiones, tienen problemas para establecer relaciones saludables, tanto con sus compañeros como con el entorno. La ansiedad, la depresión, el aislamiento social o la difícil convivencia pueden aparecer cuando no existen herramientas emocionales adecuadas para afrontar la experiencia de la vida estudiantil.

Salud mental en los estudiantes en la pospandemia

Aquí podrás encontrar...

El impacto de la crisis en los jóvenes es una gran preocupación para el 72% de los estudiantes en España. Esta es la principal conclusión del estudio realizado por CANAE, la confederación estatal de asociaciones de estudiantes, que pretende conocer las preocupaciones y necesidades de la formación de los jóvenes durante la COVID-19.

La percepción general es que la preocupación de los estudiantes hoy en día se centra más en su salud mental y el 53% siente que se encuentra en una posición inestable en su vida. En este sentido, el 56% de los estudiantes encuestados se considera entre los más afectados por la crisis, ya sea porque tiene un mal trabajo o porque no gana suficiente dinero para cubrir los gastos básicos.

Los jóvenes que entran en la universidad pueden estar ya experimentando dificultades en su vida emocional. Por ello, es especialmente importante detectarlas y ayudarlas a tiempo. No en vano, en la Residencia Montepríncipe dedicamos talleres y actividades para aprender a gestionar las emociones.

Consejos para cuidar tu salud mental

Una buena salud mental es crucial para todos nosotros, y se puede conseguir siguiendo ciertos pasos. Controlar el estrés, llevar una dieta sana y equilibrada, hacer ejercicio con regularidad y no comer en exceso ni en defecto son ingredientes necesarios para un buen equilibrio psicológico. Además, si nos enfrentamos a situaciones muy difíciles en nuestra vida, sacar tiempo para acudir a un psicólogo puede ser la mejor opción para mejorar nuestro estado mental.

Saca tiempo para ti mismo

Todos tenemos muchas cosas que hacer, ¿verdad? La universidad, el trabajo, los recados… Es fácil sentirse abrumado por las tareas del día a día y olvidarse de dedicar algo de tiempo a uno mismo.

Pero tomarse tiempo para uno mismo es una parte importante del autocuidado y del equilibrio. Hay muchas cosas que podemos hacer para practicar el autocuidado, desde simplemente beber más agua hasta ir a un día de spa.

La salud mental de los estudiantes

También podemos cuidarnos realizando actividades que nos ayuden a crecer como personas, o simplemente a disfrutar. Puede ser cualquier cosa, desde:

  • Aprender a tejer o a coser
  • Practicar yoga
  • Tomar una clase de cocina
  • Leer un libro cada semana
  • Escuchar la música que te gusta

Lo fundamental es hacer algo que te aporte alegría, algo que te ayude a descomprimirte después de un largo día o a practicar una habilidad que siempre has querido aprender.

Hacer ejercicio de forma regular

Todos sabemos lo relevante que es hacer ejercicio. No solo porque mejoraremos nuestra forma física y nuestra autoestima, sino también porque estaremos más sanos en general y nos sentiremos más felices gracias a las hormonas que segrega el cerebro cuando hacemos ejercicio, como la serotonina, la dopamina y las endorfinas.

Descansar es clave para la salud mental

El sueño es muy valioso para nuestra salud mental y nuestro estado de ánimo, y por eso necesitamos descansar al menos 8 horas al día. De hecho, dormir poco o demasiado poco puede causar depresión a largo plazo.

Ahora bien, esta idea no es nueva -todos hemos oído decir que “el sueño es la mejor medicina”-, pero la cuestión es que realmente lo es. Y no basta con dormir 8 horas en cualquier momento, sino que hay que establecer horarios de sueño regulares para sentir realmente los beneficios.

Una adecuada y equilibrada alimentación

Comer bien, aunque no lo creas, influye en tu salud mental. De hecho, la falta de ciertos nutrientes puede contribuir a la aparición de ciertos trastornos mentales. Una dieta equilibrada mejorará nuestra concentración, reducirá el estrés y nos dará energía. Comer bien significa que tenemos todo lo que necesitamos para funcionar y sentirnos bien.

¿Pero por dónde empezar? Recomendamos hacer pequeños cambios de uno en uno. Empieza con algo fácil -quizá intenta cambiar tu café matutino por un batido- y luego avanza a partir de ahí.

Cultiva tus relaciones sociales

Uno de los factores más importantes de nuestra salud mental son nuestras relaciones con otras personas.

La Organización Mundial de la Salud afirma que “la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Como los humanos somos animales sociales, necesitamos relacionarnos con los demás y cultivar relaciones sanas que nos aporten bienestar y nos hagan crecer como personas.

Pero, ¿cómo podemos saber si nuestras relaciones son saludables? Si queremos cuidar nuestra salud mental, hay dos aspectos a los que debemos prestar atención: la calidad de nuestras relaciones y cuántas relaciones tenemos.

La calidad de nuestras relaciones depende del grado de afecto, confianza, compromiso y comprensión que haya entre nosotros. También depende de que reconozcamos las necesidades del otro y nos apoyemos en la consecución de objetivos personales y compartidos.

Tener muchas relaciones de alta calidad es un factor de protección para nuestra salud mental. Pero no basta con tener un solo amigo íntimo. Nuestro círculo social debe ser lo suficientemente amplio como para sentirnos integrados en la sociedad, con la sensación de pertenecer a un grupo que nos reconoce como individuos.

Gestionar las emociones, clave para mantener una buena salud mental

Las emociones forman parte de nosotros, pero también debemos aprender a gestionarlas. Aprender a gestionar nuestras emociones nos hará la vida mucho más fácil y además tendrá un impacto muy positivo en nuestra salud mental.

Saber aceptar, comprender y comunicar nuestras emociones nos ayudará a no guardarnos nuestras preocupaciones para nosotros mismos, y entonces se “harán una bola” y nos encontraremos con un problema mayor. Debemos saber compartir y relativizar tanto lo malo como lo bueno.

Imagina que has tenido un mal día en el trabajo, llegas a casa estresado, pero no puedes hablarlo con tu pareja porque él también tiene un mal día. Esa situación solamente puede empeorar, ¿verdad? Así que aprende a comunicar tus emociones de forma sana, expresa lo que sientes y deja que los demás hagan lo mismo.

Si no puedes solo, busca ayuda profesional

La salud mental es un tema tabú. No nos gusta hablar de ello, no nos gusta verlo en las noticias, nos sentimos incómodos cuando alguien intenta sacar el tema con nosotros.

Pero, ¿por qué? Es hora de cambiar esa actitud. La mente es parte de nuestro cuerpo, y como cualquier otro aspecto de nuestro cuerpo, puede enfermar.

No es algo raro; de hecho, todo el mundo experimenta episodios de mala salud mental en algún momento de su vida. Lo que hay que hacer cuando nos sentimos mal es buscar ayuda, igual que haríamos si tuviéramos una amigdalitis o un brazo roto. Buscar ayuda es la mejor manera de recuperarse y seguir adelante con nuestra vida.

COMPARTELO
Share



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *