La moda del journaling: escribir para organizarte y sentirte mejor
Entre todo lo que tienes encima, ¿a que parece imposible tener la cabeza despejada?
Tu mente va tan rápido que cuesta concentrarte, recordar lo importante o simplemente parar un minuto. En los últimos años, muchos estudiantes han encontrado una herramienta sencilla y eficaz para poner orden al caos: el journaling.
Una práctica que no solo ayuda a organizarte mejor, sino también a sentirte más tranquilo y motivado.
Qué es eso del journaling que está tan de moda
En esencia, es el hábito de escribir con regularidad sobre tus pensamientos, emociones, tareas o metas. Aunque suene a “llevar un diario”, va mucho más allá. No se trata solo de contar lo que te pasa, sino de usar la escritura como herramienta para reflexionar, planificar y liberar la mente.
Esta práctica se ha vuelto tendencia gracias a redes como TikTok o Pinterest, donde hay montones de vídeos y fotos de “journals” cuidados al detalle: agendas con pegatinas, cuadernos minimalistas o plantillas digitales para planificar la semana, …, pero, más allá de una estética de diseño, lo importante es lo que consigue:
Reducir el estrés y la ansiedad: al escribir lo que te preocupa o lo que tienes que hacer, liberas espacio mental.
Mejorar la concentración: al plasmar tus tareas o metas, dejas de dispersarte tanto.
Conocerte mejor: reflexionar sobre lo que sientes o lo que te motiva ayuda a tomar decisiones más conscientes.
Podemos decir que escribir un rato cada día puede ayudarte a rendir más y a sentirte mejor contigo mismo.

Journaling y salud mental: escribir para cuidarte
Cada vez más psicólogos lo recomiendan como complemento en la gestión del estrés o la ansiedad. No sustituye una terapia, pero puede ser un apoyo muy valioso.
Al escribir, no solo organizas ideas, también procesas emociones. Es una forma de hablar contigo mismo, sin filtros ni juicios, y eso ayuda a liberar tensión acumulada y a ver los problemas desde otra perspectiva.
No solo eso, sino que escribir a mano tiene un efecto calmante: ralentiza el pensamiento y te obliga a concentrarte en el momento presente, algo muy útil cuando sientes que la mente va demasiado rápido.
4 tipos de journaling: encuentra el que mejor va contigo
No hay una sola forma de hacerlo.
Cada persona puede adaptarlo a su estilo de vida, según sus objetivos o el tiempo que tenga. Te dejamos los más populares:
01. Bullet journal
Probablemente el más famoso.
Se trata de usar una libreta con puntos o cuadrícula para planificar tus tareas, proyectos y hábitos. Lo creó el diseñador Ryder Carroll, y su idea es tener todo en un mismo lugar: calendario, lista de tareas, recordatorios, metas y reflexiones.
Lo bueno es que puedes personalizarlo tanto como quieras, con colores y dibujos, o dejarlo supersimple.
02. Gratitude journal (diario de gratitud)
Cada día anotas tres cosas por las que te sientes agradecido. Parece algo pequeño, pero cambia mucho la manera en que ves tu día a día. Es muy bueno para esos momentos de estrés o desánimo que aparecen sin venir a cuento, porque te ayuda a reconectar con lo positivo, que, sin querer, has dejado de lado.

03. Academic journal
Ideal para estudiantes.
Es un cuaderno (o una app) donde organizas tus clases, exámenes, fechas de entrega, apuntes, objetivos, … todo eso que tienes o que quieres hacer. También cómo te sientes con tus estudios, tus logros o tus dificultades. Así, además de tener todo controlado, te ayuda a gestionar mejor la presión.
04. Morning pages
Popularizado por la escritora Julia Cameron, consiste en escribir cada mañana tres páginas sin filtro, dejando que los pensamientos fluyan.
No importa la ortografía ni el orden, solo escribir lo que se te ocurra. Con eso, lo que consigues es vaciar la mente y empezar el día con algo más de claridad.
Cómo empezar tu propio journal (aunque no tengas tiempo)
Una de las cosas que más suele frenar es pensar que hace falta mucho tiempo o tener un cuaderno superchulo, pero no es así para nada. Puede ser tan simple como abrir una libreta o una app y dedicarle 5 o 10 minutos al día.
Te ayudamos a empezar:
Elige tu formato
Papel o digital, lo que te resulte más cómodo, eso es lo de menos.
Hay quienes prefieren escribir a mano porque ayuda a concentrarse, pero si te mueves mucho o estudias con tablet, hay apps muy útiles como Notion, GoodNotes o Journey.
Empieza con poco
No hace falta escribir páginas enteras, de hecho, puedes empezar con tres frases al día: algo que hayas aprendido, algo que te haya hecho sonreír y algo que quieras mejorar mañana, por ejemplo.
Hazlo parte de tu rutina
Busca un momento del día que puedas mantener.
Igual al despertarte, antes de dormir o al terminar de estudiar, encuentra ese momento que puedes liberar cada día y encájalo en él. Lo importante es la constancia.

No te preocupes por hacerlo “bonito”
En redes parece que todos los journals son obras de arte, pero no hace falta que el tuyo lo sea. Lo fundamental no es cómo se ve, sino cómo te hace sentir.
Usa preguntas guía
Si no sabes por dónde empezar, estas ideas pueden ayudarte:
¿Qué fue lo mejor de mi día?
¿Qué me preocupa ahora mismo?
¿Qué objetivo quiero alcanzar esta semana?
¿Qué puedo hacer mañana para sentirme mejor?
Beneficios del journaling en la vida universitaria
Puede parecer una moda pasajera, pero tiene beneficios muy concretos y demostrados. En la universidad, donde la carga mental y emocional es alta, puede convertirse en una herramienta con mucho poder para sentirte bien cada día.
Mejora la gestión del tiempo: cada vez que escribes tus tareas y las priorizas, ves con claridad qué es urgente y qué puede esperar.
Te ayuda a liberar la mente: en vez de estar dándole vueltas a todo, déjalo por escrito, verás cómo sientes que se reduce esa sensación de saturación.
Refuerza la motivación: cuando ves tus progresos y objetivos escritos en un papel o en una pantalla, notas una sensación de control y avance.
Aumenta la autoconfianza: escribir sobre todo eso que consigues y que aprendes te recuerda lo que ya has avanzado.
Favorece el bienestar emocional: algo a tener muy en cuenta en momentos de estrés o ansiedad en los que escribir puede servirte como desahogo o ser una manera de entender mejor lo que sientes.
El journaling no es solo una tendencia de TikTok o una moda pasajera, sino una práctica sencilla, que tienes a mano y profundamente útil, y lo más importante: no necesitas mucho para empezar, solo un cuaderno, unos minutos y ganas de escucharte a ti mismo.
