Cómo usar la IA para mejorar en tus estudios (sin copiar trabajos)
La inteligencia artificial (IA) ya no es cosa del futuro.
Está aquí, en nuestros móviles, ordenadores y hasta en los buscadores, y sí, también se ha colado en las clases y en las bibliotecas, mientras los estudiantes buscáis formas de organizaros, estudiar mejor o incluso entender ese tema que en clase te sonó a chino.
Pero ojo: usar la IA no es sinónimo de hacer trampas, la clave está en saber usarla como apoyo, no como sustituto.
Aprender a convertirla en tu amiga y compañera para estudiar más y mejor, sin caer en el error de dejar que piense por ti, es lo que queremos hacerte ver a continuación.
¿Qué es exactamente la IA? (para despistadillos)
Un conjunto de herramientas que, gracias a los datos, «aprenden» y son capaces de generar texto, imágenes, analizar información, darte respuestas personalizadas…
Vamos, como si tuvieras un asistente 24/7 dispuesto a echarte una mano, pero uno que no siempre tiene la razón, así que hay que saber cómo y cuándo fiarse.
Y aunque parece supertentador que te haga un trabajo entero en segundos, el verdadero valor está en cómo puede ayudarte a entender, mejorar y organizarte.
5 formas útiles de usar la IA en la universidad
Si la usas con cabeza, la IA es una herramienta brutal para tu día a día como estudiante, fíjate la de cosas que puedes tener en cuenta para aprovecharla:
1. Para entender mejor los temas
¿Has salido de clase sin tener ni idea de qué era eso de «la teoría del caos» o «el principio de Pareto»?
Vale, pues en vez de irte a Wikipedia o quedarte en blanco, pregunta a una IA que te lo explique como si fueras principiante, o incluso que te lo resuma como si fueras de la ESO, con ejemplos y en lenguaje sencillo, así te vas a dar cuenta de que es parecido a un profesor particular, sin la presión.
2. Para organizar el estudio
Una de las cosas que más cuesta a muchos estudiantes es organizar el tiempo, seguro que te pasa que tienes mil cosas por hacer y no sabes por dónde empezar.
En ese caso, úsala para ayudarte a hacer un plan de estudio realista según tus horarios, tus asignaturas y el tiempo que te queda para los exámenes, incluso que te monte un calendario semanal adaptado a tus circunstancias y necesidades.
3. Para resumir textos largos
¿Tienes que leer 60 páginas para mañana y ya son las diez de la noche?, pues otra oportunidad de aprovecharte de la IA.
Copia el texto y pídele un resumen, vale que no será perfecto, pero te da una idea general y te ayuda a decidir en qué partes profundizar.
Ojo: no te saltes la lectura si es importante, pero sí puedes ganar tiempo en los textos más densos o repetitivos, insistimos en que no debes dejarle todo a ella, solo aprovecharte de sus funciones.
4. Para generar ideas cuando no sabes por dónde empezar
A veces lo difícil no es escribir un trabajo, sino arrancarlo, de siempre una hoja en blanco ha sido la peor enemiga del estudiante.
La IA puede ayudarte a generar un esquema inicial, pensar posibles títulos, dar ejemplos o incluso proponerte argumentos a favor y en contra si tienes que hacer un ensayo.
Importantísimo: no copies tal cual, lee lo que te sugiere, inspírate y dale tu toque personal.
5. Para repasar antes de un examen
Pídele preguntas tipo test sobre un tema, o incluso que simule un pequeño examen con respuestas corregidas, esa es una forma divertida y práctica de ver si te lo sabes de verdad.
O puedes pedirle que te haga tarjetas de memoria (tipo flashcards) para estudiar vocabulario, fechas o fórmulas.
Cosas que NO debes hacer con IA (aunque sea tentador)
No todo vale, y si te pasas de listo, empiezan los líos, sin duda alguna, estas cosas las debes evitar:
Copiar trabajos enteros sin revisar
Sí, puede escribir textos, pero no siempre son correctos, originales o completos, en caso de que los entregues tal cual, te arriesgas a que te pillen (los detectores de IA existen y cada vez son más fiables), y tienes el suspenso asegurado.
Usar fuentes falsas
A veces la IA “se inventa” datos, autores o citas.
Nunca puedes olvidar revisar y contrastar con fuentes reales, en otro caso, seguro que metes la pata y pierdes credibilidad.
Dejar de pensar por ti mismo
Quizás sea lo más importante de todo.
La idea no es dejar que la IA piense por ti, sino que te ayude a pensar mejor, no se trata de usarla como atajo constante porque corres el peligro de depender de ella, lo que te quitará oportunidades de aprender de verdad.
Herramientas con IA que puedes probar
Además de los típicos chats como ChatGPT, hay muchas herramientas con IA que pueden ser útiles para tus estudios, aquí van algunas:
Notion AI: para organizar ideas, tomar apuntes o hacer resúmenes.
Grammarly (en inglés): te ayuda a corregir redacción, estilo y gramática.
Quizlet: tiene funciones de IA para crear tarjetas de memoria y juegos.
Elicit: te ayuda a investigar temas académicos y buscar estudios relevantes.
Explainpaper: para entender textos científicos complejos.
Todas tienen versiones gratuitas que, oye, para empezar y ver cuál te conviene, son perfectas si sabes usarlas bien.
¿Los profesores ven con buenos ojos la IA?
Buena pregunta.
Aún hay mucha confusión en las universidades sobre si está bien o mal usarla, lo que sí es cierto es que lo importante es ser transparente: si la usas para organizarte, repasar o inspirarte, no estás haciendo trampas.
Eso sí, si haces un trabajo en el que la IA ha tenido un papel importante, lo más honesto es decirlo, piensa que, al final, lo que cuenta es tu criterio, tu voz y tu capacidad para construir ideas.
En resumen: la IA no es el enemigo, es una herramienta (si la usas bien), la clave está en el equilibrio porque puede volverse en tu contra si la usas mal.
