El drama, la comedia, tragedia, monólogo, entremés, zarzuela, ópera y otros tantos nombres, son los tipos de teatro que el hombre ha creado como una forma de expresión de sus emociones. La palabra teatro hace referencia tanto a la rama de las artes escénicas como a las obras escritas para ser interpretadas en un escenario para un público. Apoyados en una serie de elementos como la escenografía, la iluminación, actuación, vestuario, maquillaje, etc.
En Madrid la oferta de Teatros es muy abundante, y esa es otra de las ventajas de residir en la Residencia Universitaria Montepríncipe en Madrid, donde tienes a disposición toda la gama de lugares, obras y talentos para apreciar y disfrutar.
En una puesta en escena confluyen dos elementos: actores y público, aunque una representación no solamente se logra con actores humanos, pueden intervenir títeres, como otra forma de darle vida a los personajes.
Historia del Teatro
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En el Antiguo Egipto, Asia, Grecia, India y China, hay evidencias de la existencia del teatro desde cientos de años antes de nuestra era, lo que supone el surgimiento de este arte desde hace miles de años.
Algunas investigaciones refieren el origen su origen a los antiguos rituales prehistóricos realizados por el hombre alrededor del fuego, como una forma que encontró para establecer comunicación y relaciones sociales.
Ciertas ceremonias religiosas se hacían en una escenografía a modo de teatro; así como en los rituales de cacería; y en África, esos mismos ritos se hacían al son de la música donde se desplegaba todo un lenguaje gestual y corporal que suponía la interpretación de dioses.
El uso de un vestuario especial, así como de máscaras, objetos que generaban sonidos, que tenían colores vivos y simulaban movimientos especiales, también formaban parte de los rituales que marcaron el inicio del teatro tal como lo conocemos en la actualidad.
Estos ritos fomentaban las relaciones sociales, generaban un compromiso entre las personas que se acercaban a observarlos y quienes los desarrollaban, los cuales representaban a los brujos de las danzas, que más adelante derivaron en actores.
Religión y política a través del arte
Así tenemos que, históricamente, el teatro ha sido utilizado para celebraciones religiosas y como medio para difundir mensajes e ideas políticas, para servir de entretenimiento, para expandir y promover el arte, para proyectar una sociedad, dar a conocer un lugar y como medio de expresión de emociones.
Una vez traspasadas las fronteras, Atenas se convirtió en la cuna del nacimiento del teatro durante los siglos V y VI A.C.
Allí los rituales se ofrecían al dios del vino, Dionisio, y después de muchos años de interpretación, se convirtió en uno de los grandes emblemas de la cultura griega.
En la evolución del teatro jugaron un papel principal el teatro griego y romano, cuyas obras eran principalmente del tipo tragedia, comedia, mimo y drama satírico.
A este período del teatro se le denomina clásico, porque integra el teatro de civilizaciones clásicas como fueron Grecia y Roma, y cuyas obras se escribieron en griego y latín.
Posterior a estos eventos, y durante miles de años, el teatro fue progresando y cambiando, así, aparece el teatro medieval, el teatro del Renacimiento, el Neoclásico, la ópera, el teatro francés, el teatro isabelino inglés, el teatro español del Siglo de Oro, y los del siglo XVIII y XIX.
De la tragedia a las expresiones callejeras, negras y de títeres
Habíamos mencionado los tipos de teatro que surgieron desde los inicios de esta expresión artística, donde además está la tragicomedia, el auto sacramental (con representaciones de la historia bíblica), farsa, paso, vodevil, género chico y sainete.
Posteriormente, aparecieron otros tipos de teatro, donde figuran el teatro callejero, la pantomima, el teatro negro (que se vale de efectos visuales para dar la sensación de objetos animados, aprovechando que el ojo humano es incapaz de identificar objetos negros sobre superficies negras), el teatro de sombras y el de títeres y marionetas.
¿Por qué el 27 de marzo?
El 27 de marzo ha sido escogido como el Día Mundial del Teatro, y fue creado en 1961 por el Instituto Internacional del Teatro, por lo que se celebra de forma ininterrumpida desde el año 1962.
La primera celebración se hizo en Viena, cuando fue publicado el primer Mensaje Internacional que escribió el dramaturgo francés Jean Cocteau.
Desde esa fecha, la intención de celebrar el Día Mundial del Teatro ha sido la de dar a conocer entre más gente “el mundo de las artes escénicas”. Esta fiesta se lleva a cabo en más de cien países y en cada uno se resalta la gran contribución que el arte ha hecho a la humanidad, y para resaltar su contribución al acercamiento entre diversas culturas.
La celebración de cada año incluye una programación de eventos nacionales a internacionales en los que participan figuras destacadas con quienes los asistentes pueden compartir experiencias, reflexiones y emociones sobre este arte.
“Una conversación con la sociedad”
Una de las definiciones más famosas sobre el teatro fue la que hizo el dramaturgo mexicano Víctor Hugo Rascón Banda (1948-2008), quién escribió: “El teatro conmueve, ilumina, perturba, revela, provoca, es un hecho que renace de las cenizas”, palabras que sirvieron como punto de partida para el Manifiesto del Teatro de 2006 que quedó como: “El teatro conmueve, ilumina, incomoda, perturba, exalta, revela, provoca, trasgrede. Es una conversación compartida con la sociedad. El teatro es la primera de las artes que se enfrenta con la nada, las sombras y el silencio para que surjan la palabra, el movimiento, las luces y la vida”. (Manifiesto del Teatro 2006).
Han surgido cientos de listas sobre obras de teatro más famosas a nivel mundial, y la mayoría coinciden en que las de William Shakespeare Hamlet y Romeo y Julieta son los clásicos, le siguen La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca, La Celestina, de Fernando de Rojas, Don Juan tenorio, de José Zorrilla, La Divina Comedia, de Dante Alighieri, Fuenteovejuna de Lope de Vega, El Avaro de Molière.