(Ninguna valoración todavía)
Cargando...
Hablar en público es una habilidad esencial y la vas a utilizar en multitud de ocasiones en tu futuro laboral, sea el que sea el sector por el que te decidas.
Es ahora cuando tienes la oportunidad de ponerla en práctica, y ver si te sientes cómodo con ella, porque, no nos engañemos, no todos hemos nacido para colocarnos delante de un montón de personas y exponer algún tema.
Si estás en ese grupo, si te cuesta horrores hablar ante una audiencia porque los nervios pueden contigo, hemos preparado nuestro artículo de esta semana para que consigas dar el paso y te enfrentes a una audiencia por primera vez.
La importancia de perder la timidez
Aquí podrás encontrar...
La timidez es un obstáculo significativo cuando se trata de hablar en público, sin embargo, es importante recordar que no estás solo, muchas personas comparten este miedo, y superarlo, aunque difícil, no es imposible.
Se trata de trabajar poco a poco para hacerle frente, algo que, a la larga, te devuelve sus frutos.
Aumenta la confianza en ti
Superar la timidez te ayuda a construir una mayor confianza en ti mismo, que no solo se refleja en tus habilidades para hablar en público, sino también en otros aspectos de tu vida
Te sientes más cómodo en cualquier situación con más personas, en muchos casos, desconocidas, a quien vas a tratar de una manera más fluida y a dar la mejor imagen de ti.
Mayores oportunidades profesionales
La capacidad de comunicarte eficazmente te abre puertas en tu carrera, tanto ahora como estudiante como en tu futura vida laboral.
Participar en conferencias, seminarios y entrevistas es mucho más manejable si te sientes cómodo hablando en público.
Perder la timidez permite interactuar mejor con tus compañeros, profesores y futuros colegas, expresar tus ideas con claridad y participar activamente en discusiones grupales, en las que te vas a sentir mucho más cómodo y conectar con el resto.
Un exceso de timidez, a menudo, consigue que te aísles si no le pones remedio.
Cómo enfrentarte a una audiencia por primera vez
Enfrentarse a una audiencia por primera vez es intimidante, asusta mucho y te llega a bloquear, pero con preparación y práctica, puedes superarlo.
Veamos unos cuantos consejos para ayudarte a dar el primer paso:
01. Prepárate
La clave para hablar en público con confianza es la preparación.
Es imprescindible que conozcas bien el material del que vas a tratar, asegúrate de que puedes explicar los puntos principales sin necesidad de leer tus notas palabra por palabra.
Atento a estas estrategias:
Investiga
Conocer bien el tema que vas a presentarte dará la seguridad necesaria para responder a preguntas y manejar cualquier contratiempo.
Estructura
Organiza tu presentación de manera clara y lógica, usa una introducción, un cuerpo principal con puntos bien definidos, y una conclusión que resuma tus ideas.
Ensaya
Practica varias veces, ya sea frente a un espejo, en video o con amigos y familiares.
02. Manejar tus nervios
Es normal sentir nervios antes de hablar en público, no pienses que, las personas que lo hacen a menudo, no los tienen, lo que pasa es que saben manejarlos y pueden controlar esa ansiedad que ahora siente tú.
Prueba con estos “trucos:”
Respiración profunda
Antes de comenzar, toma respiraciones profundas para calmarte, te ayudará a reducir la tensión y a centrarte en tu presentación.
Visualización positiva
Imagina que va bien, visualizar a la audiencia respondiendo positivamente a tus palabras, te ayuda a reducir la ansiedad y a aumentar tu confianza.
Postura y lenguaje corporal
Mantén una postura abierta y segura, evita cruzar los brazos o encorvarte.
El lenguaje corporal positivo, aunque no te lo creas, influye en cómo te sientes y en cómo te percibe la audiencia.
03. Conecta con la audiencia
Establecer una conexión con tu audiencia es esencial para una presentación efectiva, solo así vas a poder mantener su atención durante todo el tiempo que te tengan delante.
Si conectan contigo, ellos también están a gusto, y el resto viene rodado
A ver si te sirven, estas ideas:
Contacto visual
Buscar contacto visual con diferentes personas en la audiencia, es algo que demuestra confianza, y ayuda a mantener su atención.
Das la sensación de que estás hablando para alguien concreto, y eso hace fluir la comunicación para poner más intensidad, en el punto siguiente, la interacción.
Interacción
Involucra a tu audiencia con preguntas, invítalos a participar o utiliza ejemplos relevantes, eso hace que se sientan parte de la presentación.
Cuando aparentas estar hablando con alguien, el resto se hace partícipe, esa “conversación” con decenas de personas, pasa a ser una charla entre un grupo de amigos.
Autenticidad
Sé tú mismo, algo que siempre se dice, y es verdad, la audiencia aprecia tu sinceridad y estará más dispuesta a escucharte.
Habla de manera natural y auténtica, no fuerces expresiones o formas de hablar que no dominas, se ve a la lengua que estás forzando y, lo que es peor, es una pose que no vas a poder mantener durante mucho tiempo.
4. Manejo de preguntas y respuestas
Es probable que, al final de tu presentación, la audiencia tenga preguntas, no te debe dar miedo, eso es que les ha interesado el contenido y quieren saber más.
Aquí tienes algunos consejos para manejar esta parte:
Escucha activamente
Presta atención a la pregunta completa antes de responder, demuestras respeto y te da tiempo para pensar en una respuesta adecuada.
Sé honesto
Si no sabes algo que te consultan, es mejor admitirlo que intentar improvisar, de hecho, ofrécete a investigar la respuesta y comunicarla posteriormente.
Mantén la calma
Algunas preguntas son difíciles o inesperadas, no pierdas la compostura y tómate un momento para formular tu respuesta.
La importancia de un buen inicio en tu discurso
El inicio de tu discurso es crucial.
Es el momento en el que capturas la atención de tu audiencia y estableces el tono para el resto de tu presentación, un buen comienzo marca la diferencia entre un público interesado y uno distraído.
Te dejamos las razones por las que tenerlo en cuenta:
Capta la atención
En los primeros minutos de tu discurso, la atención de tu audiencia está en su punto más alto, y es tu momento para engancharlos y asegurarte de que sigan interesados en lo que tienes que decir.
Un inicio fuerte genera interés y crea expectativas.
Establece credibilidad
Un buen inicio también te permite establecer tu credibilidad como orador, demuestra que eres una persona informada y confiable.
Empieza presentándote un poquito, que te conozcan y confíen en ti, además, durante tu ponencia menciona datos o información de fuentes reconocidas para respaldar tus afirmaciones iniciales, en definitiva, que se den cuanta de que están delante de alguien que sabe de qué habla.
Crea conexión con la audiencia
La conexión emocional es fundamental para mantener a la audiencia comprometida y un te ayuda a conseguirlo.
Muestra empatía, haz ver que entiendes las preocupaciones o intereses de tu público, por ejemplo, a través de una historia personal, o de una observación sobre una experiencia común.
O, por el contrario, si lo ves apropiado, utiliza el humor para romper el hielo y crear un ambiente relajado, pero, siempre, asegúrate de que sea relevante y respetuoso.
Consejos para un buen inicio de discurso
Ya has visto lo importante que es, ahora vas a aprender a hacerlo, te dejamos varias opciones, no para que utilices todas cada vez, pero sí puedes ir alternando.
01.-Inicia con una historia
Las historias son poderosas, captan la atención y establecen conexión emocional, elige una de interés, que resuene con tu audiencia.
02.-Uso de una pregunta
Plantea una pregunta intrigante que invite a la reflexión, así, no solo captas la atención, sino que involucras a la audiencia desde el principio.
03.-Cita o estadística que impacte
Comienza con una cita inspiradora o una estadística que llame la atención relacionada con tu tema, con eso despiertas interés y provocas una reacción emocional.
Afirmación audaz
Haz una afirmación audaz o controvertida, que no se la esperen, que provoque curiosidad, siempre, claro, que sea relevante y puedas respaldarla a lo largo de tu discurso.
Ejemplo de un buen inicio de discurso
Imagina que tu discurso trata sobre la importancia de la sostenibilidad ambiental.
“¿Sabías que cada año se vierten más de 8 millones de toneladas de plástico en nuestros océanos?
Eso es el equivalente a un camión de basura lleno de plástico cada minuto.
Hoy, vamos a explorar cómo cada uno de nosotros puede marcar una diferencia significativa en la lucha contra la contaminación plástica.”
Este inicio capta la atención con una estadística brutal (8 millones), plantea un problema claro (la basura en los océanos), y muestra interés por un tema importante para tu audiencia (la contaminación plástica).
Sabemos que es muy fácil de decir, pero muy difícil de llevar a cabo, aun así, recuerda que hablar en público, no es más que comportarte igual que lo haces a diario, no importa que frente a ti haya cientos de personas, tú, céntrate en una y no pienses en nada más.
En cuanto des el primer paso, verás que puedes hacerlo, solo confía en ti, nosotros lo hacemos.
